Si de una cosa están orgullosos los suizos aparte de sus navajas y chocolates, son de los relojes. Una industria con una larga tradición en el país helvético, y que ha conseguido el sello de alta calidad generación tras generación. Hoy, tener un reloj Swiss Made, es sinónimo de precisión, calidad y lujo. Pero, ¿Cuándo se puede decir que un reloj es Swiss Made? ¿Qué deben de tener para conseguir la certificación de ser fabricado en Suiza?
Historia del Sello Swiss Made en los Relojes
Para que una marca funcione, o triunfe, debe de ser única, tener algo especial y ser registrada y reconocida a nivel mundial. Y esto es lo que quiso hacer Suiza con su industria de relojería. Sabían que tenían un producto único y de alta calidad, y quisieron poner su sello de identidad, relojes fabricados en Suiza.
Fue en 1971 cuando por primera vez legislaron la denominación de fabricación suiza. Se hizo un decreto ley que definía las condiciones que debían de cumplir los relojes para obtener el sello Swiss Made. Se estableció que el 50% de los costes tenían que ser suizos y además la producción final y el control de calidad debían hacerse en el país.
En 1982 se crea la la Federación de la Industria Relojera Suiza, «FH», para proteger y desarrollar la industria relojera suiza, con sede en Bienne. Cuenta con unas 500 empresas afiliadas y representa mas del 90% de todas las manufacturas de relojería en Suiza.
En 2017 se endurecieron las exigencias a las manufacturas para poder implantar el sello Swiss Made en los relojes. Esto provocó un gran debate en la industria, ya que los grandes fabricantes, que utilizan componentes fabricados fuera del país helvéticos, se quejaron debido a que los cambios que tenían que hacer para cumplir las nuevas condiciones tendrían unos altos costes en sus producciones. Sin embargo, para los pequeños fabricantes independientes, como era normal, aun les parecía poco.
Que Debe de Tener Hoy un Reloj Swiss Made
Todas las marcas relojeras deben de cumplir estas exigencias para poder marcar sus relojes como que han sido fabricados en Suiza. Hoy en día, adquirir un reloj con el sello suizo da confianza de fiabilidad, y una garantía de tener un producto fiable. Y tener esta garantía es el mejor marketing que puede tener una marca de relojes. Pero como te he dicho, para disponer del sello Swiss Made deben de cumplir los requisitos que marca la Ley de Propiedad Industrial.
- La marca debe de tener su sede en Suiza
- Al menos el 60% de los costes de la producción tienen que tener origen Suizo, o sea deben de estar fabricados en el país. El resto puede importarse de cualquier otro país, que por norma es de China.
- El movimiento del reloj debe ser de fabricación y ensamblaje en Suiza.
- Tanto el ensamblaje del reloj, como el control de calidad final, deben de estar hechos en Suiza.
Como veras, tener un reloj 100% hecho en Suiza, desde cada pieza del movimiento, hasta cada componente de la caja, es muy difícil. Fabricantes independientes y artesanales, los cuales venden piezas únicas, son quienes consiguen en muchas ocasiones conseguir relojes 100% fabricados en el país helvético.
Y el Movimiento ¿Cuándo es Swiss Made?
Seguramente que has visto algún reloj donde la esfera viene indicado «Swiss Movement», en vez de Swiss Made. Esto quiere decir que son relojes que no cumplen los puntos anteriores para poder tener el famoso sello, pero que si que compran los movimientos internos a algún fabricante suizo. Y como pasaba antes, es otro argumento que se incluye en las campañas de marketing para aumentar ventas. Pero, ¿Qué es necesario para que un movimiento sea catalogado como calibre suizo?
Pues muy parecido al caso de los relojes:
- La fabrica debe de estar en Suiza, por lo que debe de ser ensamblado en su totalidad en el país.
- El 50% de los componentes de los que dispone un movimiento deben de ser de origen suizo.
- El 60% del coste de estos componentes, deben de ser fabricados en Suiza.
- El control de calidad final debe de hacerse tambien en el país.
Imagínate, que un movimiento dispone de 50 piezas diferentes para poder ser ensamblado. 25 de ellas pueden ser importadas de otros países, pero esta cantidad no puede superar el 40% del coste total del movimiento. Así que por norma, los componentes mas caros, y los que suelen conseguir la precisión de un calibre, deben de proceder del propio país.
Espero haberte sacado de la duda, y hayas entendido cuando un reloj, o un movimiento, es Swiss Made. Recuerda, que existen muchas falsificaciones en el mercado, así que asegúrate bien la fuente de procedencia de cualquier marca para que no te engañen, y cualquier sello, como el del tema de hoy, que sea original.
Algun Ejemplo de Relojes Swiss Made
Es cierto que en el precio también se nota cuando quieres un reloj Swiss Made, pero en muchos casos, a la larga no te arrepentirás del reloj que tienes. Su calidad inicial se transforma en durabilidad, y el mantenimiento se hace posible durante muchos años sin falta de componentes. Si no dispones de un alto presupuesto para tener un reloj de estas características, puedes pasarte por este post donde te indicaba los relojes con el sello Swiss Made mas económicos.